¿Sabías que el chirrido de los frenos es uno de los motivos más frecuentes para acudir al taller mecánico? En este artículo, te damos las claves para eliminar el chirrido de los frenos de los vehículos de tus clientes con métodos rentables para tu taller.

Chirridos en los frenos, ¿cuándo se debe acudir al taller? 

El sistema de frenos es un elemento fundamental de la seguridad en carretera, por ello debe revisarse con rigor. Los ruidos de los frenos pueden producirse por muchos motivos.  

A veces no tienen importancia e incluso en ciertos casos se puede seguir conduciendo, aunque los frenos chirríen. Por el contrario, otros problemas requieren atención inmediata.  

Como norma general, los conductores deben saber que, si el chirrido es continuo, se debe consultar con un taller mecánico.  Sin embargo, la mayoría de los conductores no son capaces de distinguir un fallo trivial de una avería seria.  

En consecuencia, desde Blinker aconsejamos a los conductores que, ante la duda, acudan siempre a un taller y que lo hagan lo antes posible. Allí, recibirán el asesoramiento adecuado. Es preferible prevenir que curar.  

Si tienes tu propio taller, te sugerimos que es recomiendes a tus clientes que te hagan una visita si los frenos de su vehículo hacen ruido de forma constante, ya que ignorar el problema, puede terminar provocando un fallo mayor.  

¿Qué provoca el chirrido de los frenos? 

Como hemos señalado en el apartado anterior, el chirrido puede originarse debido a distintos factores.  Veamos algunos.  

Si eres profesional de la mecánica, seguramente sabes que las causas más comunes del chirrido de los frenos son la oxidación y la suciedad.  

Asimismo, si no se ha realizado un adecuado rodaje o cristalizado de las pastillas de freno o son de poca calidad, también pueden aparecer los chirridos.  

Igualmente, a menudo, después de cambiar los frenos, estos chirrían si algún elemento se ha emplazado de mantera incorrecta. Por eso, hay que llevar cuidado en las instalaciones.  

Otra causa frecuente del chirrido de frenos es la humedad. Cuando llueve, puede haber acumulada agua en el sistema de frenos. En este caso, no hay que preocuparse.  

Después de las primeras maniobras de frenado, el freno alcanzará de nuevo una temperatura apropiada y los ruidos desaparecerán.  

¿Por qué se ensucian las pastillas de freno?  

Como ya hemos indicado, una de las causas más probables del chirrido es la suciedad. Cuando la suciedad se acumula en los frenos puede llegar a impedir que funcionen con eficacia e incluso que los discos patinen.  

¿De dónde proviene la suciedad del sistema de frenado? Los frenos suelen ensuciarse a causa de la acumulación de polvo y arena. Otras posibilidades son los deshechos de los neumáticos o los residuos de hierro que se forman debido al uso y el envejecimiento de las pastillas de freno.  

Asimismo, las pastillas de freno se manchan de grasa o aceite procedentes del suelo, o durante el engrasado de la transmisión. 

¿Por qué se oxidan los frenos?  

Del mismo modo, el óxido también puede ocasionar chirrido de los frenos. Como ocurre en el caso de la suciedad y los residuos de polvo, el óxido se manifiesta cuando los discos han tenido una extensa vida útil.  

En el momento en que la pastilla de freno se apoya en un reborde oxidado es inevitable que se desgaste. Como resultado, terminarán por tener que cambiarse los discos.  

Igualmente, la humedad causa manchas de óxido en el disco de freno desnudo. Por añadidura, si un vehículo permanece largo tiempo parado, el óxido puede aparecer en los discos de freno. 

Cómo conseguir que frenos dejen de chirriar. Soluciones  

Ahora que ya hemos visto los motivos más habituales por los que los frenos chirrían, veamos cómo solucionarlos con los métodos más rentables para el taller.  

Tus clientes quedarán satisfechos los resultados. Y tú, también.   

Limpieza de los discos de freno  

En primer lugar, aunque pueda parecer una tarea básica y simple, limpiar los frenos puede ser muy efectivo para eliminar los ruidos molestos. Hacer una buena limpieza puede ser una solución para los chirridos muy económica para el taller.  

La mejor forma de limpiar los discos de freno es utilizar un desengrasante específico. El limpiador Brake Cleaner de Blinker elimina aceite, grasa, suciedad y lubricantes de los discos y los tambores de freno.  

Este producto, con elevadas cualidades desengrasantes, limpia la grasa y suciedad casi inmediatamente. No es corrosivo y no deja residuos. Y lo más importante para el caso que nos ocupa: previene el chirrido de los frenos.  

A continuación, puedes ver un tutorial de limpieza de discos de freno con Brake Cleaner: 

Lubricación de los frenos 

En segundo lugar, para evitar los chirridos es necesaria una buena lubricación del sistema de frenado.  

En otros artículos de este blog ya hemos hablado de que el uso de grasa de cobre para lubricar la guía de las pastillas de freno está muy extendido. No obstante, a este producto se le puede sacar más partido.  

La grasa de cobre o pasta de cobre se puede aplicar detrás de los forros de freno antes de emplazarlos en la pinza. También se puede poner grase de cobre en el cilindro.  

Antes de montar el freno, puedes pulverizar los componentes con el spray de grasa de cobre para garantizar su correcto funcionamiento.  

Otra opción para mejorar la lubricación de los frenos es el uso de un antigripante cerámico. Se trata de un químico de nueva generación que proporciona una lubricación muy duradera y resistente a temperaturas extremas, de hasta 1500ºC. 

Gracias a su especial composición, el antigripante cerámico de Blinker no se licua bajo condiciones severas de presión y temperatura y, además, tiene muy buena adherencia.  

Ahora es tu turno, cuéntanos en los comentarios cómo realizas el mantenimiento del sistema de frenado en tu taller.