Lo primero que tienes que hacer, es tener al día todas las revisiones que marca el fabricante del vehículo y para asegurarte que todo funciona perfectamente, te damos estos diez consejos a seguir:
1. Revisa el líquido limpiaparabrisas.
Es aconsejable llenar el depósito del limpiaparabrisas al máximo, en caso necesario te ayudará a mantener la visibilidad sobre la carretera.
Es un producto muy útil y barato a la vez.
No lo llenes con agua del grifo, la cal hará que se obstruyan los orificios de salida.
2. Comprueba el Anticongelante.
No quites el tapón cuando el motor está caliente, puede ser peligroso.
Los depósitos de anticongelante suelen ser translúcidos y te indica el máximo y el mínimo. Nunca lo lleves a menos del mínimo.
3. Asegúrate del Nivel de aceite.
Debes hacerlo siempre con el motor en frío.
El nivel debe estar entre el máximo y el mínimo de la raya indicadora.
4. Líquido de frenos.
En este caso no podrás ver su nivel.
Los coches de ahora, en caso de falta de líquido de frenos, en el panel de control salta un aviso.
Si quieres comprobarlo tú mismo, solo tienes que pisar a fondo el pedal de freno y ver si baja el nivel del vaso de expansión.
5. Pon atención a los neumáticos.
Debes comprobar tanto su estado como el equilibrado.
Si la banda de rodadura es menor a 3mm, debes cambiarlos.
Para comprobarlo puedes utilizar una moneda de 1€, si se ve la parte plateada, hay que sustituirlos.
Si el neumático se ve agrietado puede indicar que no tiene la presión suficiente.
La presión de los neumáticos está indicada en los mismos.
En los últimos años, los fabricantes suelen poner un dibujo indicando la presión de los neumáticos, en el interior de la tapa del depósito de combustible.
La presión aconsejada, varía según si el coche va con carga o no.
Una manera fácil de comprobar el equilibrado, es prestar atención a si el volante vibra cuando el vehículo toma velocidad, si es así, seguramente es que no tengas bien equilibrados los neumáticos y deberás acudir a un taller para que lo revisen.
6. Revisa la suspensión, encendido e inyección.
Los chirridos o el balanceo excesivo en las curvas, pueden indicarte que tienes un problema de suspensión.
Si el coche tarda en arrancar, el problema puede estar en el encendido o la inyección, incluso en la batería.
7. No te olvides de las luces.
Comprueba que todas tus luces funcionan perfectamente y aunque ya no es obligado, se aconseja llevar siempre un juego de repuesto.
Además, debes regular los faros según la carga del vehículo, si lo pones al máximo y el coche va muy cargado, tus faros iluminarán hacia arriba y deslumbrarás al resto de conductores. Te pueden multar por ello o lo que es peor, causar un accidente.
8. Repasa los elementos auxiliares obligatorios.
- Rueda de repuesto (en buen estado).
- Chaleco reflectante.
- Gato.
- Llave y triángulos de emergencia.
9. Elementos aconsejables:
Teléfono de la compañía de seguros (te salvará de un apuro).
10. Lleva la documentación Obligatoria y ahorra hasta 3.705€:
- Permiso de circulación del vehículo – te salvará de una multa de 500€
- Tarjeta de inspección técnica (ITV) – no llevarla encima te costará 10€, si la llevas caducada la sanción puede subir a 200€
- Carnet de Conducir – la multa por no llevarlo es de 10€, por llevarlo caducado de 200€, por conducir con el carnet retirado es de 500€.
- Impuesto Municipal de Circulación y Seguro – no es obligatorio pero no tenerlo la sanción puede variar entre 601€ y 3.005€, además de inmovilizarte el vehículo.
Esperamos te hayan sido útiles estos consejos.
No te la juegues en la carretera.