La soldadura es una actividad segura, siempre y cuando se respeten todas las medidas de seguridad necesarias para proteger al trabajador de los posibles riesgos.
Sin embargo, cuando las medidas no se respetan, el operario está expuesto a muchos riegos y, las consecuencias pueden ser muy graves o incluso fatales: choque eléctrico, sobreexposición a humos, quemaduras, etc.
A continuación, compartimos con vosotros las medidas de seguridad personal que no se deben pasar por alto a la hora de soldar, para realizar esta tarea en toda seguridad.
¿Cómo proteger al soldador?
Índice de contenidos
Capucha o gorro:
¡Empecemos por la cabeza! Es importante proteger el cabello y el cuero cabelludo de las chispas, especialmente cuando se realiza la soldadura en posiciones: plana, horizontal, vertical o sobre cabeza.
Mascarillas respiratorias para humos metálicos:
Cuando fundimos el metal y se vaporiza, éste se enfría rápidamente y se convierte en partículas diminutas presentes en el aire. Si las inhalamos, corremos el riesgo de que se irrite nuestra nariz, garganta y vías respiratorias.
Para evitar estos riesgos y no perjudicar nuestra salud, debemos utilizar una mascarilla respiratoria debajo de la máscara de soldar. Estas mascarillas se encargan de filtrar nuestro aire antes de inhalarlo y estar protegidos de humos metálicos en todo momento.
Máscara de soldar:
¡No hay una segunda oportunidad cuando se trata de los ojos!
El ojo humano es muy vulnerable, y cuando está expuesto a radiaciones procedentes de actividades como la soldadura, debemos protegerlos. Pero, no te preocupes, podemos evitar daños en la retina y en la córnea si utilizamos la protección adecuada del modo correcto.
La máscara de soldar cubrirá completamente la cara, los ojos y el cuello del usuario protegiéndolo de posibles quemaduras o proyección de partículas incandescentes. Además, la máscara debe estar dotada de filtros inactínicos de acuerdo al proceso e intensidades de corrientes empleadas.
Protector auditivo:
A la hora de soldar, también debemos tener en cuenta a nuestros oídos.
Necesitamos protegerlos de dos cosas: la posible entrada de chispas u otras partículas y a nivel auditivo. Podemos utilizar tampones para los oídos o auriculares.
A largo plazo, es importante proteger nuestros oídos para no perder audición.
Guantes para soldar:
¡No vale cualquier guante! Necesitamos uno que nos proteja contra el riesgo de sufrir cualquier tipo de contacto térmico o agresión mecánica.
Por lo tanto, los guantes deberían proteger las manos y las muñecas de las virutas metálicas, temperaturas elevadas, radiación y gotas de metal fundido.
¿Qué deben reunir los guantes de seguridad para poder realizar las tareas de soldadura de manera segura?
Deberán ser de cuero serraje crupón y contar con manga larga. Además, tendrán que estar forrados con tejido de algodón o aramidas.
Prendas recomendadas:
Es recomendable utilizar prendas preparadas para las técnicas de soldadura (manual y funcionamiento de máquinas), ofreciendo protección al usuario frente a las proyecciones incandescentes y gotas surgidas durante el trabajo.
Contar con ropa laboral ignífuga y antiestática es una buena opción para evitar cualquier tipo de riesgo.
También, contar con un coleto o delantal de cuero, nos ayudará a protegernos de salpicaduras y exposición a los rayos ultravioletas.
Calzado de seguridad:
Es importante tener calzado de protección, que cubra los tobillos y así evitar las chispas de soldadura y el atrape de las salpicaduras. No deben tener cordones (el cierre de velcro es una buena opción), deben tener sujeción mediante fuelle interior y protección en el empeine.
Seguridad en tareas de soldadura:
Os dejamos algunos consejos para prevenir los riesgos más comunes a la hora de realizar un trabajo de soldadura.
- Incendio
Evitar soldar cerca de líquidos o gases inflamables, combustibles, materiales inflamables, etc.
- Corriente eléctrica
Evitar lugares húmedos, ya que la humedad entre el cuerpo y algo electrificado puede causar un choque eléctrico al cuerpo del trabajador.
- Problemas respiratorios
Se debe facilitar la ventilación en la zona de soldadura con el objetivo de evacuar los humos emitidos, ya que estos pueden dañar nuestra salud.
Si sigues estos consejos y recomendaciones, podrás llevar a cabo tus labores en unas condiciones óptimas. Hay que ser cuidadosos y llevar siempre la protección necesaria. De este modo, ¡evitaremos accidentes y gozaremos de buena salud!