Índice de contenidos
Tras un periodo de inactividad o antes de iniciar un viaje, es conveniente revisar los componentes básicos de la moto y realizar las labores de mantenimiento que sean necesarias para poder disfrutar de su conducción sin sorpresas desagradables. Por eso, en este post vamos a explicar cómo hacer la puesta a punto de una moto y cuáles son los principales aspectos a tener en cuenta.
Batería
En primer lugar, cabe recordar que, si la moto va a estar mucho tiempo parada, es conveniente desconectar la batería. Si está mucho tiempo sin uso tiempo acaba descargándose por el consumo de algunos componentes del sistema eléctrico. Por tanto, si no se desconectó la batería ya sea por un olvido o por cualquier otro motivo, habrá que revisar si se ha descargado.
Si es así, para cargar la batería de la moto puedes utilizar un cargador inteligente como este. Y, en casos muy concretos, puedes emplear un arrancador de emergencia para poner en marcha la moto.
Limpieza
En segundo lugar, una vez comprobado el estado de la batería, puede iniciarse la limpieza de la moto. Evidentemente, el ambiente, las condiciones en las que ha estado guardada y el tiempo de permanencia influirán en la cantidad de suciedad acumulada.
Para realizar una correcta limpieza, primero debe mojarse la carrocería de la motocicleta con una manguera o con agua de un cubo y después se aplica el champú con una esponja. Distribuido el champú por toda la superficie, se debe aclarar con agua.
Para conseguir un aspecto de vehículo nuevo, cuando la moto esté limpia y seca, hay que aplicar una capa de abrillantador. El abrillantador Super Polish de BLINKER está especialmente indicado para abrillantar y proteger todo tipo de superficies lacadas o barnizadas como carrocerías de automóviles, camiones y motocicletas. Super Polish es muy fácil de utilizar y proporciona un brillo espectacular y una protección duradera. La mejor forma de aplicar el abrillantador es mediante un paño de microfibra.
Si además de la moto, también se desea limpiar el casco o la visera, se debe emplear una espuma limpiadora.
Neumáticos
Los neumáticos son un elemento de las motocicletas que requiere de revisiones continuas, tanto si el vehículo se encuentra parado durante largos periodos como si circula con frecuencia. Las gomas se degradan y pueden cuartearse por el simple paso del tiempo. Si al realizar la revisión detectas que presentan deformaciones o grietas, cambia los neumáticos.
Unos neumáticos en mal estado pueden poner en riesgo la seguridad por un reventón o un agarre inadecuado. Si los neumáticos no muestran desperfectos, es el momento de revisar la presión. Vigila que presión sea la misma que indica el fabricante y compruébalo con los neumáticos fríos. Si la moto ha estado parada, la presión habrá bajado.
Como recomendación, en periodos en que la moto va a permanecer inmovilizada, se aconseja dejarla sobre un caballete para que los neumáticos no toquen el suelo y prevenir que puedan deformarse.
Cadena de Transmisión
Otro aspecto esencial de la puesta a punto es revisar el estado de la cadena de la transmisión. Es básico realizar la comprobación que la tensión sea la correcta. Si no, tendrás que tensar la cadena de la moto.
Para ello te recomendamos seguir las indicaciones del fabricante. Normalmente, hay que tensar la cadena cada 800 o 1.000 kilómetros. Si no, puede suponer un peligro para el vehículo y para el conductor.
Por otro lado, lubricar o engrasar la cadena de la moto de forma periódica es vital para ya garantizar la flexibilidad al sistema de transmisión y disminuir los tirones cuando se cambia de marcha. Antes de engrasar la cadena, hay que limpiarla a fondo con un producto específico.
Olvidarse de realizar esta limpieza antes de engrasar la cadena es un error común. Pero el engrasado sin una adecuada limpieza previa puede tener como resultado la aparición de una pasta de grasa y suciedad dañina para la moto. Por tanto, es necesario saber cómo limpiar la cadena de la moto porque eliminando la suciedad se consigue alargar la vida útil.
Una vez se ha retirado la suciedad acumulada, es momento de aplicar un lubricante o grasa para cadenas. Una excelente opción es Techno Chain Lubrican de la gama InnovaPro, un producto especialmente formulado para la lubricación y protección de cadenas de giro rápido de motos.
Este lubricante es compatible con todo tipo de juntas O/X/Z empleadas en las cadenas de altas prestaciones. Por su elevadísima carga en aditivos antioxidantes, puede emplearse para la protección de todo tipo de cadenas o elementos metálicos expuestos a la intemperie incluso en ambientes salinos, con condiciones de alta temperatura o lloviendo.
Lubricación de partes móviles
Otra tarea de mantenimiento de importancia es la lubricación de los elementos móviles de la moto: manetas, mandos mecánicos, levas, palancas… Una correcta lubricación y protección de estos elementos garantiza que los movimientos de la moto se realicen de forma fluida.
Las piezas sometidas a un mayor movimiento (rodamientos, piñón de ataque, corona…) merecen una atención especial. Asimismo, no hay que olvidarse de otros elementos importantes como los cables del acelerador y del embrague. Para lubricar estas partes de la moto, la grasa adhesiva es una buena opción.
Para terminar, también se debe aplicar lubricación a la pata de cabra o el caballete central porque en ellos se sitúa gran parte de la grasa y la suciedad de la moto, además de que tienen riesgo de oxidación. Un producto adecuado para realizar esta lubricación es el Multiusos XS-100 de BLINKER, con excepcionales propiedades lubricantes y elevada capacidad para disolver grasas resecas o incrustadas, suciedad en general y óxido.
Discos de freno
El cuidado del equipo de frenos de una moto es fundamental para poder conducir con seguridad. Por ello, es importante llevar a cabo una correcta limpieza de los discos de freno. Para desengrasar los discos de freno se debe disponer de un limpiador de alta calidad, como el spray Brake Cleaner que posibilita la eliminación de aceites, grasa y suciedad y, además, previene el chirrido de los frenos de disco.
Niveles de aceite y líquido de frenos
Si no hay pérdidas, el nivel de aceite no debería experimentar grandes cambios. No obstante, como el estado y la viscosidad del aceite sí se ven afectados con el tiempo, es conveniente cambiarlo una vez al año, aunque depende también de los kilómetros que se hayan realizado y del estado de la moto. Si la motocicleta ha estado un largo tiempo parada, se aconseja cambiar el aceite.
Por otro lado, para comprobar el estado del líquido de frenos se debe examinar su textura. Si se ha vuelto esponjosa es un indicio de que precisa un cambio.
Suspensión
Cuando una moto se encuentra parada durante un largo periodo de tiempo, todos sus mecanismos pueden verse afectados. Hay que tener especialmente cuidado con la horquilla por si pierde aceite. Los retenes de la horquilla son de goma y pueden resecarse. Al comenzar a funcionar de nuevo, pueden impulsar la suciedad hacia dentro y crear una salida para el aceite. Por ello, puede llegar a ser necesario cambiar los retenes.
Arranque
En último lugar, cuando se haya terminado de revisar todos los puntos anteriores, llega el momento de arrancar la moto para comprobar el sonido y las posibles fugas. Si se confirma que todo es correcto, conviene dar una vuelta para observar su respuesta y comprobar aspectos como que no se calienta más de la cuenta o que no se producen vibraciones.
Si responde correctamente, ¡la moto está a punto y lista para iniciar una nueva aventura!
Información adicional
Si te gustan las motos, recuerda que en este blog también puedes encontrar otros artículos de tu interés como Rutas en moto: España de norte a sur o El casco: un elemento más en la revisión de la moto.
Si te gusta nuestro blog, ¡suscríbete!
Puedes obtener más información sobre nuestros productos en nuestro sitio web, nuestra página de Facebook y nuestro canal de YouTube. ¡No dudes en seguirnos para estar al día de nuestros contenidos!
